En México los naturales y los visitantes tienen la suerte de que la temporada de lluvias trae un poco de refrigeración al verano caluroso.
En las vastedades áridas efectivamente se encuentran los clichés de la publicidad para el Tequila: los cactus enormes son los únicos objetos que dan sombra.
A muchos méxicanos, el calor les lleva a la perdición: mueren de sed al intentar pasar ilegalmente la frontera con EEUU.
Aquí en las alturas, en Chihuahua, Sonora o Coahuila los hombres se protegen con sombreros vaquero claros, que tienen el mismo aspecto que los de los habitantes de los Estados del sur al otro lado de la frontera.